FEVITUR presentó, el pasado jueves 27 de abril, el Observatorio de la vivienda turística en España 2022, un estudio elaborado por el Instituto Multidisciplinar de la Empresa de la Universidad de Salamanca y que concluye que el impacto económico de los viajeros nacionales que optaron por alojarse en una vivienda turística el año pasado se ha multiplicado por cinco desde 2019 y supera los 20.388 millones de euros.
Solo el 19,1% de los gastos de un turista que se aloja en una vivienda de uso turístico (VUT) van a parar al alojamiento. El estudio determina que en 2022 el 80,9% de los gastos en estancia, 15.727,6 millones de euros, se quedaron en el destino a través de compras, restaurantes, ocio o cultura. El 63,1% de estas compras se realizaron en el barrio o en comercios de proximidad, llegando así a zonas que suelen quedar fuera de los circuitos turísticos habituales. Los gastos de estancia por persona durante todo el viaje se sitúan en 598,5 euros, una cifra sustancialmente superior a la de 2019 que alcanzaba los 412 euros.